El ministerio de Agricultura tendrá que acordar con las 17 comunidades autónomas, así como con agricultores y ganaderos una estrategia nacional para gestionar los 47.724 millones de euros, que recibirá España hasta 2027
Tras cerrar un acuerdo político para la próxima PAC (Política Agraria Común) 2021 - 2027 en el maratoniano Consejo de Ministros de Agricultura de los días 20 y 21 de octubre y superado el complejo procedimiento legislativo comunitario el gran reto que le aguarda al ministro de Agricultura Luis Planas es elaborar la hoja de ruta de su aplicación en España. Por primera vez, habrá que remitir a la Comisión un Plan Estratégico previo acuerdo con todo el sector y teniendo en cuenta las «recomendaciones» que vengan en Bruselas, así coordinarse con el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico de Teresa Ribera. En juego, el reparto de 47.724 millones de euros para los próximos siete años destinados a políticas tan diferentes como el desarrollo rural o los ecoesquemas.
A pesar de que la nueva PAC no entrará en vigor hasta 2023 y que el primer borrador del Plan Estratégico hay que remitirlo a la Comisión Europea dentro de un año, el titular de Agricultura quiere alcanzar un acuerdo global en la próxima primavera. Para ello, se volverá a ver las caras con las comunidades autónomas al menos en una ocasión más en abril y de forma bilateral en las próximas semanas. Ante lo que queda por delante Planas pidió en su encuentro con los consejeros autonómicos responsabilidad, unidad de acción y voluntad de acuerdo. Ante los medios declaró que «esta es una gran oportunidad para conseguir una PAC para todos, con voluntad integradora». Sobre la mesa temas como las ayuda directas, las asociadas y los programas sectoriales, así como aspectos como la financiación, la formación, el relevo generacional (dos tercios de los agricultores españoles superan los 50 años, destacan desde Agricultura) o la adopción de un enfoque de género para las ayudas del segundo pilar (Desarrollo Rural).
El ministro también aprovechó para marcar algunas prioridades como el mantenimiento de las ayudas asociadas al ovino, el carpino y el vacuno de leche y carne, así como los apoyos a otros sectores como el arroz y la remolacha, este último se verá muy impactado por la subida del IVA al azúcar aprobada en los últimos Presupuestos y que desde Agricultura creen que no tendrá los efectos denunciados desde las patronales.
Planas también lanzó una propuesta muy concreta a las autonomías: la creación de lo que denominó como una «reserva de buena ejecución» en el Fondo Europeo Agrario de Desarrollo Rural (Feader) - el vehículo de las ayudas del segundo pilar de la PAC- para aquellas autonomías que necesiten mayor financiación.
Tampoco faltaron referencias a la parte que le corresponderá al sector primario del Plan de Recuperación y Resiliencia impulsado por el Ejecutivo en base a los 72.000 millones de fondos de reconstrucción europeos que recibirá ESpaña en los próximos tres años. En concreto, 1.051 millones de euros para agricultores y ganaderos que según el ministro irán destinados a regadíos, a la competitividad del sector, a su digitalización o a los cultivos bajo plástico, entre otros fines.
De momento, dos fechas relevantes la semana próxima: los días 15 y 16 se celebra el último Consejo de Ministros de la UE de Agricultura y Pesca del año y el 18 de diciembre se conocerán las «recomendaciones» de Bruselas para la citada hoja de ruta.
Deja una respuesta